El Banco de Alimentos Medina Azahara reparte más de 800.000 kilos de comida en Córdoba y provincia en el primer semestre del año
Días atrás publicamos la entrevista que Onda Radio de Baena le realizó al vicepresidente del Banco de Alimentos Juan José Cas. Por problemas técnicos, agravados por las vacaciones del personal responsable, la entrevista no se pudo oír. Hoy ofrecemos un resumen escrito de la mismas pidiendo perdón por los fallos
En Baena al mes atienden a 279 personas, en Luque a 58, en Castro del Río, 78 y en Nueva Carteya a 19, sumando a más de 16.000 personas en la provincia.
El Banco de Alimentos Medina Azahara ha distribuido en Córdoba y su provincia más de 800.000 kilos de comida durante el primer semestre de 2025, según ha informado su vicepresidente, Juan José Cas Hernández. Aunque se trata de una cifra elevada, la organización advierte de que la cantidad por persona ha disminuido considerablemente respecto a años anteriores debido al descenso de ayudas procedentes de la Unión Europea.
“Antes repartíamos unos seis o siete kilos por persona al mes; ahora apenas llegamos a tres kilos y medio”, explica Cas. El motivo principal es que desde 2024 el Ministerio de Asuntos Sociales dejó de canalizar los fondos europeos a los bancos de alimentos. Además, para 2025 no se prevé ninguna partida de alimentos comunitarios destinada a este fin. “Los que tienen hijos menores de 16 años recibirán ayuda directa a través de la Junta de Andalucía, pero hay muchas personas vulnerables que quedan fuera de ese sistema”, lamenta.
Una labor que no cesa
El banco trabaja a través de convenios con grandes cadenas de distribución, de las que recoge mermas, así como mediante campañas como la Gran Recogida, eventos solidarios y subvenciones del Ayuntamiento de Córdoba, que este año han alcanzado los 50.000 euros. También cuenta con el apoyo de iniciativas privadas como la de la Fundación La Caixa, que en la última campaña aportó más de 50.000 euros.
Los alimentos no se entregan directamente a personas particulares, sino a instituciones colaboradoras, como Cáritas, comedores sociales, conventos y casas de acogida, que son las encargadas de repartir o cocinar los productos para quienes lo necesitan.
Una necesidad que no para de crecer
Actualmente, el Banco de Alimentos atiende de forma regular a unas 16.000 personas cada mes en la provincia. Antes del recorte europeo, la cifra se elevaba a más de 23.000 beneficiarios. “Es una situación muy dura. No damos la talla porque los recursos no alcanzan”, señala el vicepresidente, que reclama una revisión y actualización de las ayudas públicas y una mayor conciencia social sobre la magnitud del problema.
Al mes en Baena atienden a 279 personas, en Luque a 58, en Castro del Río, 78 y en Nueva Carteya a 19.
Cómo colaborar: donaciones, voluntariado y ayuda directa
Cualquier persona que desee ayudar puede hacerlo mediante donaciones económicas, de alimentos o participando como voluntario en las campañas que organiza el banco. “Siempre estamos ideando nuevas formas de recaudar fondos: carreras solidarias, conciertos, torneos… Toda ayuda es bienvenida, porque hay mucha gente que depende de nosotros”, apunta Cas Hernández.
El vicepresidente del Banco de Alimentos, lanza un llamamiento a la ciudadanía: “Estamos muy necesitados de ayuda. Un simple donativo puede marcar la diferencia. Además, quien lo solicite, puede recibir un certificado de deducción fiscal”.
Las donaciones pueden hacerse por Bizum al número 33 636. Para obtener el certificado fiscal, los donantes deben enviar sus datos personales al banco de alimentos.
También se necesita voluntariado para la Operación Kilo, una campaña clave para recoger alimentos en tiendas y supermercados. “Faltan manos. Si alguien quiere colaborar, puede dirigirse al banco y le pondremos en contacto con los responsables de cada zona”, indica Cas.
Finalmente, el vicepresidente recuerda que, siempre que sea posible, se prioricen las donaciones económicas frente a las de alimentos físicos, ya que eso les permite adquirir productos con mayor caducidad y más ajustados a las necesidades reales del momento.
Solidaridad estructurada y transparencia en la gestión son las claves del funcionamiento del Banco de Alimentos Medina Azahara, una entidad que, pese a las adversidades, continúa siendo un pilar de apoyo vital para miles de cordobeses en situación de vulnerabilidad.