El consejero de Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa de la Junta de Andalucía, Antonio Sanz, afirmó hoy en Cádiz que «280.000 andaluces se van a quedar sin alimentos básicos por una decisión unilateral del Gobierno de Sánchez». Estas declaraciones de Sanz tuvieron lugar en la inauguración del Congreso de la Federación Española de Bancos de Alimentos que se celebra en la capital gaditana. Una cifra, la de 280.000 andaluces, que en palabras del consejero «puede ser incluso mayor porque la alternativa del Gobierno de Sánchez no es suficiente».

Antonio Sanz destacó que los residentes en la comunidad autónoma andaluza van a tener entre 9.000 y 15.000 tarjetas monedero al año, lo que se traduce en que «un 85% de las personas que necesitan los alimentos pueden quedar excluidas por esta decisión».

Para el consejero de la Junta se trata de «un error unilateral» del Ejecutivo y que «deja fuera a ocho de cada diez municipios de Andalucía y que pone en riesgo ni más ni menos que la labor de 1.300 entidades de reparto de alimentos y que además castiga de manera muy importante a la Andalucía rural».

«Hoy la Junta traslada en este Congreso su apoyo a la labor que vienen desarrollando los bancos de alimentos, que en estos momentos se ve en peligro por la decisión que desde el Gobierno de Sánchez se está planteando, al querer suspender los programas que hasta ahora eran un rotundo éxito en favor de las familias andaluzas y españolas», destacó.

Sanz quiso advertir que el programa «va a dejar fuera a muchas familias que no tienen hijos» e incluso «la cifra puede ser mayor si se suman las familias con hijos a su cargo que no tendrán acceso a las tarjetas monedero». El consejero explicó que desde el presente año hasta 2029 «los fondos destinados a Andalucía alcanzan los 118 millones de euros, pero solo vamos a disponer de entre 9.000 y 15.000 tarjetas monedero. ¿El resto de los andaluces se quedan fuera?» ya que «solo en 2023 en Andalucía se beneficiaron del reparto de alimentos un total de 330.000 personas». Por otro lado, alertó de que «las personas mayores con pensiones muy bajas, las personas sin hogar, los inmigrantes, las mujeres víctimas de violencia de género o las familias con hijos de 18 años o más que también pueden estar en situación de extrema necesidad. Y familias con hijos menores y que cumplan los requisitos y que no puedan acceder porque no hay tarjetas suficientes» se quedarán fuera del programa.