La Fundación Prolibertas, dependiente de la Orden de la Santísima Trinidad y de los Cautivos (padres trinitarios), ha dado la voz de alarma ante la pérdida de financiación de su centro de día, a causa de un cambio legislativo en las bases de la convocatoria de las subvenciones de la Junta de Andalucía. Esto ha obligado ya, por ejemplo, a cerrar los viernes. La entidad realiza un llamamiento a las instituciones públicas, privadas y a la ciudadanía en general, con el objetivo de conseguir el dinero necesario, que también ha menguado en el área de empleo hasta el punto de perder todos los programas salvo uno.

Esta situación coincide con el récord de necesitados que han acudido al comedor social San Juan Bautista de la Concepción, que atendió el pasado año a 1.451 personas diferentes, lo que supone un crecimiento del 36% con respecto al año anterior. «Volvemos a situaciones de años anteriores, y me refiero a la época de la crisis de 2008-2009», ha precisado el delegado de Prolibertas en Córdoba, Eduardo García

La organización cordobesa gestiona un comedor social y programas de ayuda, y será una de las afectadas por la tarjeta monedero que entra en vigor en abril

El propio centro de día, que se creó en el año 2018, ha batido también su récord de usuarios, al atender a 1.002 personas, lo que supone un incremento del 13% con respecto a 2023. Por su parte, el programa de empleo ofreció cuatro cursos de hostelería y el proyecto Entretejid@s, que ofrece formación para mujeres sin hogar. En total, se beneficiaron de ellos 273 personas.

A pesar de la situación, tanto el centro de día como el programa de empleo corren un grave peligro. En el caso particular del centro de día, funcionaba hasta el momento con un presupuesto de 200.000 euros. «Ahora mismo nos hemos quedado a cero y estamos intentando negociar tanto con entidades públicas como privadas», ha expresado García con gran preocupación. Por su parte, el director general de la fundación, Antonio Jiménez, ha adelantado que «en caso de no conseguir toda la financiación, deberíamos dejar parte de las actividades del centro de día».

Esta sección de Prolibertas ofrece en concreto servicios de desayuno, merienda, consigna, lavandería, asistencia social en múltiples aspectos y organización de talleres. Sus usuarios son, especialmente, personas sin hogar, inmigrantes, personas con adicciones, enfermos mentales o aquellos que padecen la conocida como patología dual, que comprende justamente la adicción y la enfermedad mental. «No queremos cerrar el centro de día, vamos a ver lo que podemos salvar», ha concluido Jiménez.

En la comparecencia ante los medios, a la que también ha asistido el superior de los Trinitarios, Sergio García, los responsables de la fundación han solicitado también la cesión, por parte del Ayuntamiento, del local con el que cuentan en la calle Sagunto, con el fin de mejorar las instalaciones mediante el traslado de la cocina al lugar. Tras la cesión, solicitada formalmente en 2020, este inmueble requeriría de una rehabilitación.