TOMADO DEL diario CÓRDOBA
Por Ruth Rodríguez
El Banco de Alimentos de Córdoba ha vivido este año su Gran Recogida de Alimentos más inusual. Marcada por la Covid-19, han tenido que sustituir, durante esta semana, su tradicional colecta de alimentos en los supermercados por donaciones económicas que más tarde se canjearán por alimentos básicos.
Carlos Eslava, presidente del Banco de Alimentos de Córdoba, ha echado en falta, durante esta semana en la que se ha desarrollado la singular recogida, el cariño y el contacto con la gente. «Independientemente de cuál sea el resultado económico, es importante tener en cuenta que este factor nos ha faltado; era y es algo muy importante porque antes la gente te preguntaba, le aconsejabas y todo eso se ha perdido», cuenta el presidente. Entiende que la campaña se ha visto obligada por las circunstancias provocadas por la Covid-19, pero no puede evitar sentir «una pena profunda». «Ahora es cuando hemos vivido la necesidad y cuando hemos experimentado que más falta hace el estar con los otros». Gran parte de la comunicación de este evento se ha realizado a través de medios sociales, lo que, en cierta medida -aclara el presidente- ha aliviado la situación. No obstante, cree que «las personas mayores y humildes han quedado fuera del sistema».
El pilar del Banco de Alimentos de Córdoba, según su propio presidente, son los voluntarios, que aportan solidariamente su granito de arena para hacer que todo funcione. Miguel Ángel Bellido, es uno de ellos y lleva 5 años ayudando en el Banco. «La mayoría somos gente mayor y estamos tristes de no poder ayudar este año por la Covid-19», lamenta. Como Eslava, considera que este año la campaña «está siendo muy fría». No es lo mismo, dice, «que veas a los voluntarios con su chaleco y su sonrisa que, cuando vayas a pagar, te diga un cajero si quieres aportar algo. No dudamos de la capacidad de los profesionales, pero nosotros les podíamos explicar de una forma más cercana y abierta lo que necesitábamos». La labor de los voluntarios, durante esta semana, se ha limitado a informar mediante redes sociales y en los supermercados con todas las medidas de seguridad.
Como punto positivo de esta Gran Recogida, Eslava ha señalado la comodidad que implica que los propios supermercados clasifiquen los alimentos y que, cuando el Banco de Alimentos reciba las donaciones podrán canjearlas por los alimentos que «realmente necesitan». Desde el punto de vista económico, es «mucho más rentable y no tenemos que enfrentarnos a la locura logística que vivíamos antes».
…(1ª parte)…
DIARIO CORDOBA GRAN RECOGIDA