La Fundación ”la Caixa” y CaixaBank han dado el pistoletazo de salida a la segunda edición de la campaña Ningún Hogar Sin Alimentos, que el año pasado, tras el inicio de la pandemia, logró recaudar 3,4 millones de euros para que los bancos de alimentos pudieran ayudar a familias en situación de vulnerabilidad.

Los bancos de alimentos atendieron a medio millón más de personas que el año anterior: en total, 1.560.000 personas, de las cuales más de 360.000 fueron niños. La Federación Española de Bancos de Alimentos (FESBAL) advierte de que esta situación podría agravarse si no se produce una mejora de la economía.

La crisis de la Covid-19 ha ampliado el perfil de personas que acuden a los Bancos de Alimentos: ya no solo se trata de personas en situación de pobreza severa, sino también de familias de rentas medias o bajas y parejas jóvenes que han perdido sus empleos, debido a la crisis que han sufrido distintos sectores económicos, como consecuencia de la pandemia.

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